Sin olvidar los errores propios del anterior gobierno, que no supo entender lo que la ciudadanía le había encomendado, el 2011 estuvo marcado por un cambio de gobierno en el Ayuntamiento de Jerez ayudado por la crisis económica que padece el país y manifestado en forma de desempleo.
Un cambio de gobierno que después de 7 meses no ha supuesto una mejora en cuanto a los problemas estructurales del Consistorio, ni mucho menos una mejora en los problemas cotidianos de los jerezanos y las jerezanas. De hecho, podríamos decir que el Ayuntamiento está técnicamente paralizado y que la crispación, la privatización, el expolio del patrimonio de Jerez, los despidos y las mentiras son los adjetivos que califican a un gobierno que ni mucho menos es austero, transparente o valiente, como nos quiere hacer ver la señora Pelayo.
Comenzó el mandato municipal con una huelga de la concesionaria del servicio de recogida de basuras y limpieza viaria, Urbaser, salvada in extremis ante el posicionamiento del gobierno municipal de revisión del convenio firmado por el anterior gobierno socialista, que no era otro que garantizar los pagos de la deuda histórica a la empresa, y en consecuencia, garantizar la estabilidad de sus trabajadores.
Para el PP era fundamental la revisión de este servicio dentro de su política de recortes y, de hecho, previstas para otros servicios municipales (Onda Jerez, Aguas de Jerez, Ayuda a Domicilio, etc.) pero que en el caso de Urbaser se encontraron con un escollo imprevisto como fue el convenio firmado por el gobierno socialista. Esta fue la primera tentativa oculta del Partido Popular de ajuste bloqueada indirectamente y que, por tanto, supuso reajustar las medidas de recortes y que se materializará con la subida del recibo del agua que recaerá impositivamente en los ciudadanos con la venta de Aguas de Jerez.
Seguidamente un ERE en Onda Jerez, donde se manifiesta un gobierno sin la mínima sensibilidad y capacidad de diálogo con los trabajadores que, simplemente, son las víctimas de una gestión sustancialmente mejorable. Hay que recordar que Pelayo ya fue alcaldesa de Jerez entre 2003-04, y por tanto, también responsable de la situación, sin olvidar los interés ocultos del PP de crear para su servicio partidista una red mediática en los todos los municipios de Andalucía, y en los que Onda Jerez, no queda eximido.
Por ello, el Partido Popular ni valora ni estudia posibles soluciones que no pase por medidas traumáticas e ignora las alternativas planteadas por los trabajadores de Onda Jerez que pueden ser la salvación para esta empresa municipal.
Pelayo y su gobierno decían que la imagen de Jerez era un valor a potenciar y, de hecho, ha sido siempre empleado en todas sus intervenciones. Pues bien, en el caso del conflicto de los autobuses urbanos de Jerez se les olvidó por completo. La imagen de Jerez ha quedado muy deteriorada, nunca en la historia una huelga duró tanto tiempo ni provocó tantos daños económicos irreversibles al comercio de Jerez. La falta de interés, la incapacidad para solucionar el conflicto, las continuas ausencias de la alcaldesa y la incapacidad para dialogar en la búsqueda del consenso son las causas de que el conflicto durara más de tres meses, inaudito en la historia reciente de Jerez y difícil de encontrar una situación similar en cualquier otra ciudad de España.
Así, llegamos al conflicto de Acasa, el servicio de ayuda a domicilio. Un conflicto que se está eternizando en el tiempo con una huelga que comenzó el 3 de enero y prorrogado hasta el próximo 20 de febrero sin que el gobierno del Partido Popular presente una solución para las 500 trabajadoras. El impago de las tres últimas nóminas y la incapacidad manifiesta en no asumir su responsabilidad evidencia un gobierno sin ideas y sin proyecto de ciudad. La denigración del colectivo reflejado en todos los medios nacionales fue la manifestación más clara y contundente de la inoperancia de una alcaldesa que demostró que el velo de la sensatez, la cercanía y la responsabilidad que vendía en la oposición tenía fecha de caducidad.
El Partido Popular y García-Pelayo, a la cabeza, continuamente se escudan en la falta de colaboración o retrasos en los pagos de la Junta de Andalucía para eludir su obligación de abonar las nóminas a las empleadas del servicio de ayuda a domicilio. Pero lo único constatable a día de hoy, es que la Junta está al corriente “y el Ayuntamiento que ella gobierna no”. Jerez no se merece un gobierno local que utilice la penuria y la desesperación de las trabajadoras de Acasa, que apenas cobran 800 euros, como arma arrojadiza contra la Junta en su estrategia de descalificar al PSOE para sus intereses electorales.
Las promesas vertidas por la alcaldesa de dignificar el servicio, a sus trabajadoras y a los usuarios dependientes durante la campaña electoral no han hecho más que demostrar uno de los fraudes electorales más fragrantes de la vida política jerezana.
El Partido Popular, ni cree, ni apuesta por la Ley de Dependencia. Un ejemplo de ello, es el gobierno de Mariano Rajoy, que ha paralizado la entrada de nuevos usuarios dependientes, y que Javier Arenas sentenciará si por desgracia gobierna en la Junta de Andalucía.
Por último, el retraso del pago de las nóminas de los trabajadores municipales cada mes se acentúa más. La alcaldesa prometió que con el Partido Popular no habría problemas económicos en la ciudad y que la paz social sería uno de sus objetivos de gobierno. Pues bien, ni uno ni lo otro, no sólo no ha dado solución a los problemas económicos del Ayuntamiento sino que ha creado otros por su falta de diálogo y de transparencia en la gestión. Un gobierno local, que con su actitud prepotente, demuestra no saber gestionar una mayoría absoluta ni buscar los equilibrios y acuerdos necesarios en democracia.
Jerez se merece un gobierno responsable, eficaz y capaz. Un gobierno que anteponga los intereses de los ciudadanos a los partidistas, un gobierno que dignifique a sus trabajadores, que garantice unos servicios públicos de calidad, y que diseñe un proyecto de ciudad que aporte soluciones al problema de desempleo que padecen miles de jerezanos y jerezanas. En este sentido, emplazamos al Partido Popular y a la alcaldesa de Jerez a que gobierne y que no haga oposición a la oposición.
José Antonio Díaz Hernández
Secretario General de Juventudes Socialistas de Jerez
